Quizás porqué...

Sunday, July 04, 2004

Acerca de la Catedral de Salamanca

Y sí, uno se siente ridículo al chocar de frente con tanta maravilla. Inevitable no verlo, inevitable el reflexionar acerca de cómo siglos atrás edificios de monstruoso tamaño fueron construidos, pero hay cuestiones aún más intrigantes que perturban mi dormir.
Si el oro fue, es y será el símbolo de riqueza de un institución cuyo propósito es el bien común (o al menos eso enseñan los catequistas), ¿cómo es posible que lo derroche de forma tan escandalosa en lugar de ayudar a quienes realmente lo necesitan?
Luz, cámara y acción; la vida es un constante rodaje, un película eterna (nunca infinita) y nosotros, los seres humanos, tan sólo efímeras criaturas tan intrascendentes que para paliar nuestro complejo de inferioridad nos vemos obligados a jugar a los reyes del universo.

0 Comments:

Post a Comment

<< Home